Colombia: Los templos comedor de Fundación SACIAR son el corazón de una comunidad
Si bien Colombia es un país de ingresos medios altos, aún existen altos índices de desigualdad, pobreza e inseguridad alimentaria. Las estadísticas más recientes de 2019 muestran que el 4,6 % de la población estaba desnutrida y 1 de cada 10 niños padecía desnutrición crónica.
Fundación SACIAR, un banco de alimentos ubicado en Medellín, Colombia y miembro de la Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia (la red nacional de bancos de alimentos en Colombia), ha implementado un programa para proporcionar comidas a niños que enfrentan inseguridad alimentaria desde 2002. En 2019 estos templos comedores, o “templos comedores”, proporcionaron almuerzos nutritivos diariamente a 1500 niños en 14 sitios dentro y fuera de Medellín. Algunos templos comedor también sirven desayuno, aunque la necesidad de este servicio ha disminuido con la expansión del programa de desayuno escolar del gobierno nacional. Un nutricionista del banco de alimentos ayuda a desarrollar los menús para los templos comedores. Los almuerzos proporcionan el 35 por ciento de los requisitos de energía y nutrición de un niño para un desarrollo saludable. El programa de almuerzos requiere de la participación de la comunidad: las madres y otros familiares se turnan para preparar los almuerzos de los niños. Si bien los almuerzos son gratuitos para los niños, el apoyo de los miembros de la familia para preparar las comidas es una forma de que ellos contribuyan al programa y a la salud de sus hijos.
Los templos comedor sirven como algo más que cocinas: son centros comunitarios. Además de alimentos, SACIAR y sus socios brindan educación alimentaria, educación en salud e higiene, atención psicosocial y capacitación a los niños y sus familias. Algunos templos comedor incluyen salas comunitarias, canchas deportivas, jardines y bibliotecas. Los fines de semana sirven como iglesias, una pieza importante de infraestructura comunitaria para los vecindarios.
Los almuerzos proporcionan el 35 por ciento de los requisitos de energía y nutrición de un niño para un desarrollo saludable.
Los programas de almuerzo del templo comedor mejoran la nutrición y los resultados de salud entre los niños a los que sirven. También mejoran los hábitos alimenticios de los participantes. Cuando los niños llegan por primera vez a un templo comedor, a menudo no quieren comer las verduras y la carne que se sirven en el almuerzo. Sin embargo, después de una participación continua en el programa, los niños comienzan a comer todos los alimentos frescos proporcionados. Aprenden a usar utensilios y a llevarse bien con otros niños. SACIAR también informa haber visto cambios en las actitudes y valores de las madres y familias que participan en la programación brindada.